Existen infinidad de tipos de mascarillas con diferentes virtudes y aplicaciones según cada tipo de piel. En el articulo de hoy te dejo tres tipos de mascarillas con diferentes propiedades, que son muy fáciles de realizar en casa y le aportaran grandes beneficios a tu piel.
Recuerda que antes de aplicar la mascarilla debes limpiar tu rostro y dejarlo libre de impurezas que se acumulan por el polvo, el sudor y el maquillaje.
Mascarilla Exfoliante de Avena:
Para eliminar las células muertas de la piel, licua o mezcla media taza de avena, agrega media cucharadita de miel, dos cucharadas de leche, 2 gotas de aceite de almendras o rosa mosqueta, si tienes piel grasa puedes añadir unas gotas de limón. Mezcla todo bien y aplica la pasta en tu rostro con los dedos realizando masajes circulares. Déjala secar durante 10 minutos y retira con agua tibia. Tu rostro quedará más suave y eliminaras las células muertas que hacen que la piel se vea apagada y sin luminosidad.
Mascarilla Refrescante de Pepino:
El pepino logra magníficos resultados en la piel; hidrata, aporta vitalidad, es excelente para calmar la piel sobre todo si se ha tomado mucho sol en un día de playa, ayuda a desinflamar las bolsas en los parpados y también reduce el exceso de sebo e impurezas en pieles grasas. Esta mascarilla es muy fácil de preparar debes triturar un pepino pelado hasta que quede una pasta, se extiende por el rostro se deja por 15 minutos y se retira con agua fría. Si la usas para calmar la piel es conveniente que la mezcla la dejes en frió unos minutos.
Mascarilla Renovadora Antiarrugas de Miel y Huevo:
Tiene propiedades hidratantes, reafirmantes y regeneradora, aporta luminosidad sobre todo en pieles secas y desvitalizadas. Debes combinar dos cucharadas de miel de abeja con una clara de huevo y mezclar con una cucharada de zumo de limón. Aplica en el rostro con suave masaje y deja actuar durante 20 minutos, sentirás como la piel se estira pero debes permanecer con el rostro relajado. Posteriormente retirar con agua tibia. Si la repites al menos una vez por semana la piel te lo agradecerá.
Antes de usar cualquier mascarilla ten en cuenta que no seas alérgica algunos de sus componentes, y aunque algunas de ellas se pueden usar todos los días es preferible dejar que la piel descanse y hacerla una vez por semana al menos.
Espero que les haya gustado y recuerden, no hay tiempo que perder con el cuidado de la piel… y cada mínimo detalle suma para que tu piel le haga frente al paso del tiempo.
